Habitaciones prácticas, con un buen diseño y también impecables con una vista bonita al océano. Lo que más me ha gustado ha sido el personal, eran extraordinariamente complacientes y muy agradables.

Una zona recreacional, una ubicación tranquila en las proximidades de diferentes zonas, del centro de la ciudad, de del centro. Las camas eran cómodas, y había un minibar, una caja fuerte privada, una plancha y tabla de planchar en la habitación.

Su personal ha sido grosero.

El hotel está muy bien ubicado, justo en la playa, lo que ofrece unas vistas y un ambiente relajante. Además, se encuentra al lado de varios restaurantes, lo que facilita la opción de probar diferentes tipos de cocina sin tener que desplazarse demasiado. La habitación es espaciosa y cuenta con cómodas camas, perfectas para descansar después de un día de actividades en la playa. El servicio del personal es amable y atento, asegurándose de que los huéspedes tengan una estancia agradable. Además, se ofrece un desayuno variado y delicioso, ideal para comenzar el día con energía.

El wifi en el hotel es lento y poco confiable, lo que puede ser frustrante para aquellos que necesitan estar conectados durante su estancia.

Una buena elección de opciones en el desayuno increíble y realmente bueno...

¡Todo fue fantástico!